por Christian Sanz
El día de ayer (6 Sep 09), diario La Nación publicó la versión de que el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, compraría "aviones no tripulados" de última generación — aparentemente como los que se usan en Medio Oriente — para controlar desde el aire la supuesta evasión impositiva del ruralismo vernáculo (1).
En tal contexto, es dable recordar lo publicado oportunamente por Tribuna de Periodistas respecto al paso de Echegaray por la Armada Argentina en los "años de plomo" (2), donde hizo un curso de "aviación naval" junto a pilotos que participaron en las operaciones de la Guerra de Malvinas, con los entonces modernos aviones Súper Etendard.
Es probable que de aquella época provengan las novedosas y descabelladas ideas del titular de la AFIP sobre la compra de "aviones no tripulados" como los que usa Israel en la vigilancia de su pequeño territorio; o los aviones no tripulados que compró el presidente de Brasil, Lula, para controlar las operaciones de contrabando de drogas y armas en la triple frontera.
Lo insólito es que Echegaray no tiene la intención de vigilar el territorio nacional para combatir el contrabando de drogas y de armas que se produce en las zonas "calientes" de la frontera con Bolivia o en la Triple Frontera, sino la mera evasión de ruralistas. ¿No es acaso una decisión de una imbecilidad supina?
Según fuentes de la AFIP, el avión que se intenta adquirir es el modelo Heron-1 de la compañía estatal Israel Aircraft Industries (IAI), con un costo cercano a los... ¡20 millones de pesos por unidad! (3)
Lo interesante es que, según los mismos informantes, Echegaray se habría mostrado más ambicioso — a la vez que irónico —, al asegurar: "¿Veinte millones de pesos y un solo avión? ¡No! ¡Eso es poco! Queremos por lo menos 20 aviones para el año 2010". A esta altura, se hace evidente que, detrás de la decisión del titular de la AFIP, hay un negociado millonario que llenará los bolsillos de más de un funcionario K.
"Parece que el gobierno de los Kirchner tiene plata para comprar aviones no tripulados para vigilar el estado biológico de las parcelas rurales, las hectareas sembradas de soja, los silos supuestamente no declarados y el estado de las cosechas, pero no tiene plata para comprar radares para colocar en las zonas del norte argentino y de la triple frontera con Paraguay y Brasil por donde entran y salen las drogas y las armas, ante la vista gorda de las Aduanas de Salta, Formosa, Chaco, Misiones, etc, sin contar con las pistas clandestinas de Santiago del Estero; tampoco tiene plata para equipar a la Fuerza Aérea Argentina para comprar aviones ni para dotar a la Prefectura Naval de aviones para vigilar el litoral marítimo argentino de la depredación pesquera", admitió a este cronista un importante funcionario de la Aduana con gran ofuscación.
No es para menos, en un momento de crecimiento exponencial de la pobreza y la desocupación, donde la Argentina se ha convertido en la nueva Colombia, merced a las políticas erráticas de los Kirchner y sus laderos. Con un jefe de Gabinete como Aníbal Fernández, que impulsa la despenalización de la tenencia de drogas y hace lobby para que no se sancione un oportuno registro de precursores químicos — que evitaría la presencia de narcos foráneos en el territorio argentino — y un titular de la AFIP como Echegaray que ha desmantelado todos los controles aduaneros.
Antes de hablar siquiera sobre la compra de un avión de calesita, el titular de la AFIP debería explicar cuestiones más relevantes a los intereses nacionales. Por un lado, tendría que aclarar por qué ha mencionado al abogado "trucho" Christian Turba como coordinador de Comercio Exterior de la ONCCA, con oficinas en el tercer piso del edificio de la AFIP.
Por el otro, debería responder algo inexplicable: si el 3 de septiembre pasado se incineraron — supuestamente — dos toneladas y media de efedrina, ¿por qué no se queman otros estupefacientes y precursores que aún reposan en el Puerto de Buenos Aires y la Aduana de Ezeiza?
Sin palabras.
Christian Sanz
(1) La Nacion
(3) La Semana
Fonte: Tribuna de Periodistas
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