domingo, 17 de agosto de 2008

Comprando el Silencio

VERGONZOSO: VUELVEN A INDEMNIZAR A LOS FAMILIARES DE VICTIMAS DE LA AMIA
Es la prueba cabal de que jamás se llegará a la verdad respecto a lo sucedido el 18 de julio de 1994, cuando estalló la sede de la AMIA de la calle Pasteur: el gobierno ha decidido indemnizar a los familiares de los muertos a través de un proyecto de ley anunciado por el representante en Derechos Humanos de la Cancillería, Horacio Méndez Carreras durante una reunión de trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Si algo faltaba al circo generado en torno a esta causa, era una nueva indemnización. Demuestra que no sólo no se llegará a su esclarecimiento, sino que se callará a los díscolos con dinero.
¿Es que acaso no hay pruebas de lo sucedido en la AMIA? Sí las hay, y son profusas. Pocos saben que existe incluso la factura de la bomba que estalló en la AMIA. Es un documento irrefutable, donde puede verse la compra de varios kilos de nitrato de amonio — el mismo explosivo que estalló en la puerta de la AMIA — y que pertenece a Nassif Hadad, dueño de una firma constructora y, no casualmente, de la empresa de volquetes Santa Rita.
Perteneciente a esta última empresa, es el volquete que se puso en la puerta de la AMIA minutos antes de que estallara. Dentro de él, estaba parte del explosivo que derrumbó el edificio mencionado.
Lo que jamás hubo fue una camioneta bomba, tal cual se sigue afirmando hasta el día de hoy. El único testigo de la supuesta existencia de esta, Nicolasa Romero, se desdijo posteriormente. Los otros 199 testigos de la causa judicial, juran no haber visto nada semejante.
Saben esto las asociaciones de víctimas de la AMIA, así como también funcionarios del gobierno nacional. Cristina Kirchner, por caso, fue presidente de la comisión que investigó ambos atentados — a la Embajada de Israel y la AMIA — y siempre sostuvo que había que investigar la "pista siria", no la "iraní". De la misma manera, siempre negó la existencia de una Traffic bomba. ¿Qué sucedió posteriormente para que cambiara radicalmente su postura?
Se sabe que hubo una presión puntual y directa por parte de ciertos grupos de poder de gran influencia, especialmente de Estados Unidos e Israel. Lo demás, es historia conocida.
En ese contexto debe entenderse esta nueva indemnización a los familiares. Lo que se está comprando es el silencio de todos ellos.
¿Cómo se entiende, si no, que se vuelva a indemnizar a personas que ya cobraron en su momento por el mismo ítem? Por más que se lo quiera disfrazar de "compensación uniforme", sigue siendo una puntual indemnización.
El avance de esta medida es realmente vergonzoso. Demuestra que no importa la verdad, sólo el dinero.
Algún día, muchos tendrán que dar severas explicaciones. Néstor Kirchner, Cristina, los diferentes titulares de AMIA y DAIA, los familiares de las víctimas y sus abogados, especialmente Pablo Jacoby y Alberto Zuppi.
Lo mismo cabe a los periodistas que permitieron semejante desinformación, puntualmente "adornados" por onerosos fondos del Estado (1).
85 personas murieron el día que estalló la AMIA. Con esta nueva mentira, han muerto por segunda vez.
Christian Sanz
(1) Ver nota sobre periodistas corruptos:  Periodico Tribuna=2950

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